¡Quiero un concierto!
¡Pues toma tres en uno!
Las guitarras y las distorsiones de los malagueños Notes to Myself abrieron la noche del 21 en la Sala Vivero el pasado miércoles. Juanlu puso la voz a temas ya conocidos de la banda bajo la atenta mirada de sus habituales, bajo los flashes y las cámaras de vídeo que registraron su actuación de principio a fin.
Tras los merecidos aplausos a los Notes llegó la primera pausa. Y entre la música de Joy Division y Arcade Fire, los técnicos desmontaron y montaron el escenario para una nueva actuación: la de los catalanes Madee . Las primeras palabras de Ramón, el vocalista, invitaban a acercarse un poco más al escenario, ya que, hasta el momento, el público había mantenido una ordenada fila tras una imaginaria valla.
El acercamiento animó a la banda, que arrancó su actuación con It's a wonderfull lie, un clásico extraído de su primer disco Secret Chamber. Tan bien había empezado la cosa que cuando anunciaron la última canción, nos pareció corto y, la verdad, es que no tocaron todas las canciones que aparecían en el setlist. Pero no quedaba mucho tiempo: había que dar paso al cabeza de cartel.
Volvieron a aparecer los técnicos y, entre el montaje de los nuevos instrumentos, apareció Jeremy Enigk, ex-Sunny Day Real State. Junto a él, volvieron a pisar el escenario de la sala algunos de los componentes de Madee para apoyar instrumentalmente al americano. Así, guitarra al hombro, Enigk abandonaba sus raíces emo para pasarse a un pop suntuoso y orquestado.
La sorpresa de la noche vino de la mano de Enigk que, al poco de comenzar su actuación, rompió una cuerda, así que, para hacer tiempo mientras el protagonista cambiaba de guitarra, Madee se marcó un nuevo tema. Una noche redonda.
[Imagen: Notes to Myself by DuNa]
5 comentarios
Alvaro -
Saludos desde el agua
Leicca -
Leicca -
que me daba pena no venir a veros.
anaccapote -
Exodus -